domingo, 9 de agosto de 2015

Abril//April 2015


Director Marcelo Blazquez (EET 460), profesoras Maricel García Flöel (Berufliche Schule Elmshorn), Hilda Zbrun y alumnos de alemán//
Direktor Marcelo Blazquez (Technische Schule Rafaela EET Nr.460), Spanischlehrerin Maricel García Flöel, Hilda Zbrun und Schüler der Deutsch-AG

Cuarto año del intercambio estudiantil (2014/2015)


Julio-agosto 2014 (del 12 de julio al 11 de agosto 2014)


Birte Möller (alemana) 5º año/2014/terminalidad Nutrición. Se alojó en la casa de Santiago Serra y nos cuenta de sus experiencias en Rafaela.

"Estoy contenta de haber hecho el intercambio, ya que pude conocer cómo viven las personas del otro lado del mundo. Particularmente me ha gustado la excursión a Buenos Aires y la recomiendo. Mi familia de intercambio me ha recibido cariñosamente y pasé un hermoso tiempo con ellos. Nos hemos divertido muchísimo, no importa si estábamos entre los jóvenes o con las familias todos juntos. Además me alegró mucho la visita a la fábrica de leche y al frigorífico, fue muy interesante. Me hubiese gustado que nos quedáramos dos semanas más, porque no pudimos conocer el idioma y la cultura con más profundidad. En conclusión, pasamos lindos momentos, también en el colegio. Sólo puedo recomendar participar de este intercambio. Todo fue muy bueno, también en la escuela. Yo recomiendo hacer el intercambio."

Birte Möller-Santiago Serra y familia.

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Victoria Cejas (argentina) 5º año/2014/terminalidad Informática. Se alojó en la casa de Laura Gomes Ventura.

"A través de este viaje pude descubrir como viven otras personas en “el viejo mundo”. Allá el clima es completamente diferente al nuestro, hace mucho frío y casi nunca hay sol, siempre llueve y oscurece muy temprano en invierno. El paisaje es blanco y muy lindo, la nieve (que no pude apreciar mucho) es lo más lindo que tiene el frío invierno. La escuela es enorme, sus profesores son amables y poseen un gran conocimiento, allí no solo se enseñan carreras para seguir la universidad, si no también, se capacita a otros alumnos para un empleo especifico. La familia que me alojo fue muy buena conmigo, nunca voy a dejar de agradecer que me hayan tratado tan bien. En todo momento estuvimos bien comunicados y me han explicado sobre la historia del continente europeo, me llevaron a conocer Berlín. Hice un Tour por Hamburgo. Gracias a ellos pude ver a mi tío y a mis primos. Conocí Portugal (un país hermoso). Me trataron como a su hija, me incluyeron en su familia y me hicieron sentir muy bien. Ellos fueron lo mejor del viaje, mi otra familia: Gomes Ventura. Hacer el intercambio a Alemania fue una de las mejores decisiones que tomé en mi vida, conocí costumbres nuevas, pasatiempos nuevos, ciudades extraordinarias, se mas de la historia de Alemania y adopté una nueva familia, la cual espero mantener el contacto asl en el futuro ellos puedan conocer nuestro hermoso país."


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Emilio Ferrario (argentino) 5ºaño/2014/terminalidad Electromecánica. Se alojó en la casa de Raya.

"Esperé muchísimo tiempo que llegue el momento de viajar. En medio de esto tuve algunas complicaciones que me imposibilitaban realizarlo, pero con la gran ayuda de las profesoras Maricel García e Hilda Zbrun, las que voy a estar eternamente agradecido, se pudieron solucionar .El viaje fue perfecto; el vuelo, la llegada, el encuentro con una familia que no conocía, ya que Raya no había venido a Argentina como los otros estudiantes. Igualmente, ellos me recibieron como si hubiera sido un integrante más de su familia. Me llevaron a conocer muchísimos lugares, y me enseñaron varias cosas sobre su país. Me sentí muy cómodo. La forma de vida es muy distinta a la que tenemos en Argentina, y me costó muchísimo acostumbrarme, como así también me costó acostumbrarme al horario, a la comida, al idioma, que cuando comenzaba a comprenderlo mejor, el tiempo se terminó. Es una experiencia que enriquece a uno muchísimo como persona, ya que se convive con otra cultura totalmente diferente, y además te hace aprender a valorar cosas que se hacen tan importantes que uno no puede creer que antes no les prestaba atención. Además conocí mucha gente nueva, que recordaré por siempre, y que espero algún día volver a visitar. Alemania es un país hermoso, y me llevo se esta experiencia muchos recuerdos, muchas amistades, reflexiones, y muchos nuevos conocimientos sobre historia, costumbres e idioma. Espero que este intercambio siga siendo posible y que otras personas tengan realmente el privilegio de poder realizarlo."


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Facundo Heymo (argentino) 5ºaño 2014/terminalidad Electromecánica. Se alojó en la casa de Jorrit Biernatzki.

"Cuando estos chicos llegaron por primera vez a Rafaela todo resulto ser extraño, si bien nosotros ya nos habíamos preparado y nos imaginamos lo que iba a significar alojar a otros chicos, los tres primeros días fueron algo incómodos para mi ya que en mi familia son algo espontáneos y no tienen ningún problema en expresar lo que sienten, y menos cuando se trata de un extranjero teniendo una barrera tan grande como es un idioma mismo.Al pasar los días todo se fue tornando más sereno, incluso mis padres y Jorrit, mientras comíamos, ya podían entablar una conversación no del todo entendible pero en fin, coherente.Unos días más tarde ya estábamos en la fecha reunidos todos juntos, para darle la despedida. Nos veríamos unos meses después. Los días que pasamos en Alemania estuvieron geniales, si bien había días que por el clima u otras cosas no podíamos hacer mucho, estos chicos se dedicaron a armar un cronograma, por así decirlo, para que podamos aprovechar al máximo nuestro viaje. Con relación al idioma ya desde muy temprano como es común en Alemania todos se levantaban, se sentaban en la mesa y comenzaban a dialogar en alemán respectivamente. No había mucha piedad a la hora de conversar, era el idioma nativo e inglés. En este viaje pudimos conocer una cultura y forma de vida diferentes de cómo vivimos el día a día en Argentina. Si bien esto fue una experiencia magnifica, creo yo que la propia “experiencia vivida” como se dice, fue pasar solo, con otra familia, otra cama, otras comidas, otros lugares, en fin, otra cultura, un mes y medio a tantos kilómetros de distancia."


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Jorrit Biernatzki, 5ºaño/2014/terminalidad Mecánica. Se alojó en la casa de Facundo Heymo.
"Me gustó mucho el intercambio estudiantil en Rafaela (Argentina).Estuve en una familia muy simpática y amorosa. Mi compañero de intercambio es muy amable y enseguida me ha tratado como su hermano. Con mi familia de intercambio hemos hecho muchas actividades. Hemos visitado por ejemplo una ciudad muy antigua. También hemos estado en Santa Fe y hemos paseado por esta ciudad hermosa. Lo más destacado fue la visita a Buenos Aires. Allí estuvimos dos días y tuve la impresión que hemos recorrido y conocido muy bien toda la ciudad, sencillamente una maravillosa ciudad. Si pudiera, volvería a viajar de inmediato a Argentina. Fue un viaje increíble que jamás olvidaré!"

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Santiago Serra (argentino) 5ºaño/2014/terminalidad Electromecánica. Se alojó en la casa de Birte Möller.
"A lo largo de un mes, compartí tiempo con una familia de Alemania,  mi cabeza estaba llena de interrogantes y especialmente de dudas, se podría decir que me sentía con miedo pero no fue todo realmente así: el idioma, la gente, la cultura, el habla, el clima, la ciudad, la escuela, los jóvenes, todo eso era nuevo para mí, y por ese motivo trataba de disfrutar a lo grande cada momento, cada estatua, cada foto que le podía sacar a algo de historia era muy importante. 
El Idioma: En las primeras semanas, me costó amoldarme al idioma, ya que era difícil entender lo que me decían o pedían. Al pasar los días, mi oído se fue acostumbrando y se fue haciendo habito y lo que era difícil en pocos días se hizo sencillo, cabe aclarar que el idioma de la gente alemana no es como aparece en las películas o como la gente dice, sino que es como cualquier cuidad con su idioma (hablan rápido, pero se entiende)
El Clima: Nunca había estado en un lugar con tanto frío, las temperaturas máximas de frío fueron de -18º. También fue la primera vez que conocí la nieve, era todo nuevo y hermoso para mí.
La Gente: Es muy agradable (no esperaba que sean así), me llevo una gran y linda imagen, ya que una de las iniciativas a volver es porque la gente es muy predispuesta, humilde, agradable y compañera.
La Ciudad: Es muy bonita, es todo muy tranquilo, ya que cada uno se hace cargo de sus cosas y no toca las de los demás, está todo muy bien organizado (la limpieza, el orden, los carteles, las calles en buen estado, etc.…)
La Familia: Le quería agradecer, especialmente, a la familia Möller porque me sentí como uno más de su familia, me aceptaron como era y me dieron todo lo que podían y tenían a su predisposición, también descubrí que en Alemania existe el compartir y la humildad  y eso me enseño mi hogar alemán, me lo enseño MI FAMILIA. El compartir año nuevo con ellos fue algo muy bonito y nuevo, ya que aprendí como festejan y las distintos costumbres que tienen.
Me di cuenta de que, lo que realmente hace falta en el mundo, son oportunidades para escuchar a alguien decir “el mundo no está tan mal como creemos”. Solo queda en los jóvenes buscar esa necesidad de aprender un nuevo idioma, nada es difícil, pero cabe aclarar que el desafío es empezar. Regresé a Argentina con la cabeza volteada. Con un desastre de ideas, y no digo “desastre” porque sean inservibles, sino porque son demasiadas. Y demasiadas ideas pueden, poco a poco, ayudar al mundo a aceptarse como lo que es: una increíble pieza de arte.
Regresé llamándome “idea”, queriendo durar una eternidad en la cabeza de quien piensa, sin importarme clases sociales, ideales, nacionalidades ni religiones. Regrese de Alemania con nuevos proyectos y decisiones y hasta se podría decir que volví renovado. Regresé siendo del mundo." 









jueves, 6 de agosto de 2015

Tercer año del intercambio estudiantil (2013)

Junio-julio 2013 (23 de junio al 24 de julio 2013)

En el tercer año de realización del intercambio estudiantil  nos visitaron tres alumnos alemanes: Can Berrak, Alena Willhöft Y Maximilian Hartlieb. Los rafaelinos que viajaron fueron Gabriel Bircher ,Evaristo Acosta y Germán Roldan. 

Cena de bienvenida en Rafaela.

Alena Willhöft (alemana) 5ºaño/2013/Terminalidad Nutrición. Se hospedó en la casa de Jonatan Heit(casa sustituta). Ella nos  cuenta sobre su experiencia en Rafaela:
“Las cuatro semanas fueron definitivamente muy cortas! Me hubiese quedado mucho más tiempo aquí. El país, la gente, la comida – todo es distinto que en Alemania, pero eso es lo que me pareció magnífico. Ambas familias me recibieron muy bien y las voy a extrañar mucho! Espero ansioso la llegada de los tres a Alemania. Rafaela es una cuidad fantástica. Mucho más grande que mi cuidad. Estoy seguro de que voy a volver! Junto a la familia pasamos unos hermosos días en el norte argentino! Lo que más me gusta acá es la gente. Son muy abiertos y quieren saber todo sobre uno, por ejemplo sucedió eso en la escuela. También recibí regalos por parte de la cuidad =) Voy a extrañar Argentina!” (traducido del alemán) Alena


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Can Berrak (alemán) 5ºaño/2013/Terminalidad Economía. Se hospedó en la casa de Gabriel Bircher. El nos cuenta sobre su experiencia en Rafaela: 
“Me gustó mucho Rafaela. Es una ciudad muy linda, principalmente el centro. La gente es muy afectuosa y amable. Eso fue lo que más me gusto. Tuve una muy buena relación con mi familia anfitriona y estoy triste tener que despedirme de ellos. A mi parecer la vida en Argentina es más digna de vivir, por lo cual estoy considerando seriamente venir a trabajar un año después de terminar la escuela. Estoy contento de haberme decidido por este intercambio y lo volvería hacer sin pensar. Muchas gracias por todo!” (traducido del alemán) Can 


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Maximilian Otto Hartlieb (alemán) 5ºaño/2013/Terminalidad Economía. Se alojó en la casa de Evaristo Acosta. El nos  cuenta sobre su experiencia en Rafaela:
“El tiempo que pase en Rafaela y en Tucumán fue maravillosa para mí. Pude captar momentos especiales, conocer un modo de vida distinto, una forma de vivir que a mí personalmente me gusta. Me sentí muy bien/cómodo todo el tiempo. Principalmente la gente me impresiono mucho y las llevo en el corazón. En resumen, fue una gran experiencia pero fue muy corto el tiempo. Ni por un segundo me arrepentí por este viaje y espero que vuelva tener la posibilidad de visitar Argentina de nuevo. Muchas gracias por cuatro semanas inolvidables.” (traducido del alemán) Max 

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Directora y profesoras de español en Elmshorn con alumnos rafaelinos(enero 2014)

Germán Roldan (argentino) 5ºaño/2013/Terminalidad Electromecánica. Se alojó en la casa de Alena. Germán nos cuenta su experiencia en Alemania.
El viaje a Alemania fue sumamente interesante para mí, me dio la oportunidad de conocer otro país, sus tradiciones, su gente, mejorar mi alemán y hacer nuevos amigos. En todo momento la gente fue muy amable y agradable conmigo y se preocuparon para que entendiera lo que me decían,  a pesar que a veces esto resultaba frustrante.



Allá pude conocer las ciudades Berlin, Hamburgo, Tornesch (donde viví), Elmshorn, Uetersen, Pinneberg, Glückstadt y lugares específicos junto con su historia e información importante como la iglesia St Michel, Hamburg Rathaus, Elbphilharmonie, Hamburg Hafen, Seehundstation Friedrichskoog, Nordsee, Brandenburger tor y el submarino ruso U-434.
No tengo muchos aportes que hacer, solo que el período debería ser un poco más largo. Quizás de unas seis semanas, debido a que con cuatro apenas empezamos a entendernos en alemán y ya debemos volver a casa, y hacerlo de mucho tiempo más sería demasiado costoso y problemático con la escuela, las fiestas y el precio de los pasajes. Por otro lado, creo que sería muy provechoso para los alumnos de intercambio recibir una visita guiada por las escuelas el primer día, donde se les explique cómo están organizadas, como funcionan, y cualquier información que pudiese resultar pertinente para el manejo del alumno por el edificio escolar.
Quiero destacar la predisposición de todos a colaborar y la paciencia que mostraron para con nosotros. También su organización, puntualidad, y planificación para llevar a cabo actividades.
La experiencia fue sumamente gratificante, y estoy realmente agradecido con todas las personas que colaboraron para hacerlo posible, especialmente a la familia Willhöft que me recibió en su casa, me trato como alguien de su familia y me enseñó mucho sobre su país; con la familia Heit, que recibió a Alena por mí en Argentina debido a mi imposibilidad de hacerlo; a las señoras García y Berta, quienes coordinan el intercambio a través de escuelas N° 460 "Guillermo Lehmann" de Rafaela, Argentina y la Berufliche Schule Elmshorn de Elmshorn, Alemania y a los directivos escolares que prestan las instalaciones y nos reciben en las instituciones antes mencionadas.
Finalmente quiero decir que disfrute mucho esta experiencia y del tiempo que pase en Alemania, y espero, en algún momento si surge la oportunidad, volver a realizar este viaje y reencontrarme con todas las personas que conocí allá y tuve que dejar para volver a mi país.

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INTERCAMBIO RAFAELA – ELMSHORN 2013/2014
¡Qué maravillosa experiencia pude vivir! La verdad es que sólo he disfrutado del intercambio, tanto cuando alojé como cuando me alojaron. Todo salió bien: los vuelos, los recibimientos por parte de las dos familias, el bienestar que sólo una familia puede brindar, los aprendizajes cosechados, las charlas en el idioma que estudiamos, TODO. Sin lugar a dudas que estamos todos contentos y que si tuviéramos que volver a decidir si participar o no, elegiríamos participar. Fueron lindos momentos: en la escuela, en familia, en las fiestas, los paseos, las excursiones… El tiempo no alcanzó para hacer todo lo que queríamos (como aprender el idioma aún más o visitar más lugares) pero sí para mantenernos en actividad constante. Insertarse en una cultura del otro lado del mundo, con tantas diferencias (vestimentas, músicas, comidas, idioma, clima, etc.) no fue fácil al principio. Por suerte fuimos curiosos y dispuestos a integrarnos, así que conocimos a mucha gente nueva y pasamos momentos inolvidables. Estoy eternamente agradecido de poder haber realizado el intercambio, y por eso mi deseo es que más chicos participen de este en los años próximos. Les agradezco en primer lugar a Frau Berta y Frau García, que son las profesoras que coordinan el intercambio, y son las que siempre están en contacto con nosotros. Pero también agradezco a las autoridades y profesores de las escuelas E.E.T.P. N° 460 “Guillermo Lehmann” (Rafaela, Argentina) y Berufliche Schule Emlshorn Europaschule (Elmshorn, Alemania) por sus atenciones y servicios.
Gabriel Martín Bircher

Directora del colegio "Berufliche Schule Elmshorn" con alumnos rafaelinos.

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Evaristo Acosta(argentino)5º año 2013/Terminalidad Construcciones. Se alojó en la casa de Maximilian Hartlieb.Evaristo  nos cuenta su experiencia:“Al empezar a estudiar alemán en segundo, lo sentía un idioma lejano y totalmente extraño. Y cuando nos dijeron que existía la posibilidad de viajar a Alemania, realmente no lo tome en serio ni llegue a imaginar que lo terminaría haciendo. Pasaron los años, y seguí asistiendo a las clases en la escuela. Pero no me di cuenta de que realmente iba a viajar, hasta que los estudiantes alemanes llegaron a nuestras casas. Fue ahí recién que tome conciencia de la veracidad de este hecho. 


Lejos está el estudiar un idioma de saber hablarlo, y cuando tuve que hablar con los chicos, recién me di cuenta de ello. Lleno de dudas y titubeos al principio, con mayor confianza a medida que pasaba los días, comenzamos a conocernos. Y vale aclarar que no son ellos como los pintan las películas, ni como se dice que son (es decir, personas frías como tímpanos de hielo, enormes, rubios, y que hablan como ladrando, igual que en las películas de la segunda guerra mundial), sino que su alemán suena mucho más suave, parecido al francés y lejos del gruñido gutural al que nos acostumbró el cine, simpáticos y habitualmente correctos los chicos llegaron con buena predisposición y con muchas ganas de conocer Argentina.Mientras estuvieron acá, nos divertimos, y fuimos con ellos de vacaciones a distintos lugares de la Argentina. Conociendo comidas, como el asado, el dulce de leche, las empanadas y muchas más. Conociendo nuestra cultura, y nuestra simpatía y carisma. Y aprendiendo nuestro idioma, distinto del español peninsular que estudian en la escuela. Pero un día tuvieron que volver, y con caras tristes, pero contentos de conocernos, nos despedimos sabiendo que nos veríamos en Alemania. Fue en ese momento que los nervios comenzaron, preparándonos para el viaje, y a medida que se acercaba nuestra fecha de partida, nuestras expectativas crecían y al mismo tiempo nos llenábamos de dudas (¿serían todos los alemanes igual de simpáticos que ellos?, ¿cómo sería la familia?,¿cómo era realmente Alemania?) . Sabiendo que iríamos en pleno invierno alemán, donde todo se vuelve blanco por la nieve, armamos nuestra valija. Y un día partimos para allá, entre las despedidas con la familia y las ganas de conocer otra parte del mundo.Sin embargo, Alemania no fue igual a lo que habíamos imaginado. Llena de vida aún en invierno, nos mostró una sociedad totalmente diferente, con grandes sentidos de la responsabilidad y del civismo, y multicultural, donde los alemanes, turcos, polacos, etc. conviven todos los días. Con una arquitectura que solo había visto en libros, y otra que no conocía, vivía un país quede no se detenía por el frío para realizar toda clase de actividades.Las personas fueron muy simpáticas, y jóvenes y adultos preguntaban interesados por Argentina, un país del que poco sabían (más allá de Messi, Maradona, y otros futbolistas famosos). Y a pesar de ser más distantes que nosotros. Fueron todos muy amables, y aprendimos a conocer y aprender de su cultura, y de su idioma. Por suerte tuvimos pocos días con nieve y pudimos recorrer bastante, divertirnos y pasarla bien.Sin embargo, como todo se acaba y tuvimos que volver, y entre abrazos y promesas de volver a visitarnos, regresamos a Argentina. Tristes por la despedida, pero contentos por las experiencias vividas, y las personas conocidas.Es por esto que recomiendo a todos aquellos que puedan que participen de este intercambio. No se van a arrepentir”.Evaristo


Segundo año del intercambio estudiantil (2012)

Junio-julio 2012
(25 de junio al 25 de julio del 2012)

Tres alumnas alemanas se han animado a cruzar el Atlantico para visitarnos. Ellas son Kim-Lisa Krube, Sarah Strenge y Nicole Schweder. Los rafaelinos que viajaron en enero del 2013 son Lucas Olivera, Tomás Perino, Darío Rodriguez y Carolina Meshler.



Visita a la fábrica Basso S.A. (5º Informática junio 2012).

Visita a la Escuela Técnica de Maricel García, profesora de español en la escuela de Elmshorn  (enero 2013).



Kim-Lisa Grube (alemana) 5ºaño/2012/Terminalidad Nutrición. Se alojó en la casa de Tomás Perino. Ella nos cuenta sobre sus experiencias en Rafaela y en su casa como anfitriona:


“Argentina – el cariño en persona: Las valijas ya estaban listas y tenía mucha alegría anticipada. Faltaban sólo horas para que comenzara la aventura. Se me cruzaron mil preguntas por la cabeza: ¿Cómo será la familia en la cual estaré por un mes? ¿Serán simpáticos?¿Me entenderán cuándo hablo?¿Me sentiré cómodo en esa familia? Pero ya no había más tiempo para pensar, porque comenzaba el viaje. Nos despedimos de nuestras familias y subimos al avión. Nos esperaba un largo viaje, teníamos que cruzar el gran charco. Esto era una sensación indescriptible. ¿Cuántas personas pueden decir que viajaron a Argentina? Bueno, yo no conocía hasta ese entonces a nadie. Realmente fue un viaje cansador. Viajamos desde Fráncfort directo a Buenos Aires, en total estuvimos 17 horas en el avión. Pero pudimos pasar el tiempo mirando películas cuando no dormíamos. Había llegado el gran momento, llegó el momento de bajar del avión y pisar por primera vez suelo argentino (en ese entonces no sabía que no iba a ser la última vez). Nos dio la bienvenida nuestro taxista, que tenía un auto relativamente chico, pero logró acomodar todas nuestras valijas, una ejecución magistral! Ahora sólo faltaban seis horas más para llegar a nuestro anhelado destino. Estábamos todas cansadísimas, pero infinitamente felices cuando vimos el cartel a la entrada de la ciudad  que decía Rafaela. Al llegar nos recibió cálidamente la profesora de alemán Hilda Zbrun de la Escuela de Educación Técnica N° 460. Por mi, podría seguir así de bien nuestra bienvenida, pensábamos. Esperamos juntas que nos buscaran nuestras familias anfitrionas….y por fin llego el momento que tanto habíamos esperado, el primer encuentro. Desde el primer instante sentía que había buena química, y nos abrazaron, todas las preocupaciones se fueron en sólo un instante. Gente tan amable no había conocido hasta ese momento. Y fue entonces que supe, que esta iba ser una estadía inolvidable! Mi familia anfitriona, los Perinos, se esforzaban mucho en atenderme. Tenían una casa muy linda con pileta y un perro. Todos los días comíamos algo rico. No tuve problemas con la comunicación, a veces nos comunicábamos con las manos, como podíamos. Tomi, mi hermano y yo nos entendimos desde un principio. La primera noche conocí  a todos sus amigos y me recibieron muy bien, y sin prejuicios! El tiempo empezaba a pasar muy rápido. Vivía tantas cosas emocionantes y nuevas. Acompañaba a Tomi a la escuela, que se diferenciaba totalmente de la escuela en Alemania. Nos juntábamos con amigos, íbamos a fiestas, fuimos de vacaciones y teníamos tantas ideas de cosas que queríamos hacer. Lástima que el tiempo volaba. No lo quería aceptar pero las cuatro semanas habían terminado. La despedida nos costó mucho. Es increíble lo rápido que uno se encariña con las personas. Yo ya lo tenía decidido, quería volver a visitar Argentina. El país y su gente me habían fascinado. Estaba muy triste cuando tuve que dejar mi familia anfitriona, pero lo bueno era que en sólo seis meses Tomi iba a visitar Alemania, mi familia y la cultura alemana.
Los seis meses de espera a la llegada de Tomi, nos pareció a todos interminable. Cuando había llegado el momento, fuimos juntos al aeropuerto a buscarlo. También en este encuentro hubo buena química. Era como si un miembro de la familia habría vuelto de un viaje. Las siguientes semanas pasaron volando. Mis padres, que en un principio tenían miedo no poder comunicarse con Tomi perdieron rápidamente el miedo, porque  fue más fácil de lo pensado. Le mostramos comida típica alemana como “Currywurst“(salchichas con curry) y  “Fischbrötchen“como hamburguesas caseras, además visite con él Berlin. Pero las cuatro semanas fueron muy poco tiempo, ya que teníamos que asistir también a clases y nos quedaba poco tiempo libre. Sin embargo fue una experiencia inolvidable y le recomendaría a cualquiera emprender esta viaje aventurero. Uno hace nuevos amigos y se supera a sí mismo. Extraño todos los días a mi familia anfitriona y dentro de poco tiempo volveré a visitarlos de nuevo.” (traducido del alemán) Kim- Lisa 



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Sarah Strenge (alemana) 5ºaño/2012/Terminalidad Nutrición. Se alojó en la casa de Carolina Meshler. Ella nos cuenta sobre sus experiencias en Rafaela:

“Mi estadía de cuatro semanas en Argentina comenzó con una bienvenida de mi familia anfitriona Meshler. Fueron muy hospitalarios y simpáticos, desde un principio me sentí acogida. Junto a mi hermana Carolina íbamos a la escuela técnica en Rafaela. Como su terminalidad era Informática no podía seguir mucho las clases. Sus compañeros y profesores eran muy amables, y se interesaban por Alemania. Hicimos algunas excursiones con la escuela, a veces los fin de semana o escapadas por un día a Santa Fe, a una pequeña granja y un tour en barco en Esperanza.
Al principio no estaba acostumbrada a las costumbres y tradiciones, por ejemplo los horarios en que se comía y las comidas (mucha carne), las salidas de noche o la actitud con respecto al colegio. También el tránsito y sus reglas parecían muy aventureros. Pero después de unos días ya me había acostumbrado y mejorado mi español. Al final del intercambio hasta hicimos unas pequeñas vacaciones en Córdoba.
A pesar de haber viajado en invierno a Argentina, el tiempo casi siempre estuvo lindo, incluso unos días de sol. Le recomendaría a todo aquel que tenga interés en conocer gente nueva, diferentes culturas y experiencias nuevas, realizar este intercambio.
Mi madre: Estábamos nerviosos cuando se aproximaba la llegada de Carolina. Nos preguntábamos si nos íbamos a poder comunicar, para así poder saber si se sentía bien o le faltara algo, ya que en Alemania era invierno y hacía -12°C, en cambio en Argentina justo era pleno verano. Al principio hablábamos en inglés y de a poquito se fue incorporando el alemán. En nuestra familia somos cinco personas y siempre había algo para hacer, y Carolina participaba en todo. Hicimos algunas excursiones, fuimos a patinar sobre hielo, fuimos a la playa en St. Peter Ording, visitamos Hamburgoy cocinamos juntos comidas típicas argentinas. Para todos nosotros fue una linda experiencia recibir visita del exterior. A pesar de las clases que tenían que asistir a diario y la preparación hacia del Abitur (Examen final de la secundaria) de nuestra hija Sarah, Carolina pudo aprender un poco sobre la vida en Alemania. También el invierno tuvo su lado bueno: Muñecos de nieve y viajar en tren – ambas cosas imposibles en Rafaela.” (traducido del alemán) Sarah y su madre

Visita a San Carlos, con Silvia Krauel (Viceregente), alumnas alemanas e Hilda Zbrun.



Primer año del intercambio estudiantil (2011)

Julio 2011:

En un mundo globalizado, donde las redes sociales como Facebook, Skype, etc. marcan tendencias, el contacto interpersonal se ve cada vez más facilitado, ya que se acortan las distancias. Esto ayudó también a la cooperación entre ambas escuelas que participan en este intercambio. Cuando en julio del 2011 dos alumnas de quinto año, Vivien Balzat y Sandra Gertsch, de la escuela “Berufliches Gymnasium“ en Elmshorn viajaron a la Argentina, ellas se ya habían comunicado con sus compañeros argentinos de intercambio a través de Facebook e intercambiado información personal, así como también fotos. De todos modos estaban ansiosas por conocer este lejano país. Desde el momento en que llegaron comenzó el shock cultural: las largas distancias, las regiones despobladas, la inmensa pampa argentina, y también la pronunciación, que tenía poco que ver con lo que habían aprendido en sus clases de español en Alemania. Experiencias como estas y conocer un país totalmente diferente son las que hacen este intercambio inolvidable para los participantes de ambas escuelas. 




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Vivien Balzat
(alemana) 5º año/2011/Terminalidad Nutrición. 
Fue alojada en la casa de Juan Ignacio Russo.
Ella cuenta sobre su experiencia en Rafaela: “El interés por nuevos desafíos, conocer otras culturas y mejorar mi español, fueron los motivos de mi viaje a Argentina. El largo viaje valió la pena. Conocí mucha gente e hice muchos amigos nuevos, con los que gracias a internet pude seguir contactando. Apenas habíamos llegado, nos sentimos acogidos por todos. A pesar de ser desconocidos, no nos veían como tal. Realizamos muchas excursiones con mi familia anfitriona. Viajamos a las montañas (Córdoba), donde apreciamos la bellisíma naturaleza. De las cuatro semanas de estadía, dos fueron  de vacaciones y las otras dos de clases.
En las vacaciones nos juntábamos con amigos y así fui mejorando mi español. Muy pocos hablan inglés y menos alemán, pero estaban muy interesados en saber más sobre mí, por eso nos comunicábamos como podíamos. Además participamos juntos con otros compañeros en un curso de Tango, que nos encantó. A los argentinos les gusta mucho comer, tienen otro ritmo de vida, y en el caso de ser muy delicado/a con las comidas, uno no se debería preocupar, ya que en Argentina no va a pasar hambre. A veces es difícil seguir la clase en la escuela, pero es muy interesante ver un estilo de aprendizaje diferente. Todos los alumnos se esforzaban mucho y estaban muy atentos en clase.

Cuando los chicos nos visitaron, fue también una gran experiencia. Ahí me di cuenta, cuánto esfuerzo y tensión están detrás de todo esto. Estando aquí también hicimos varias excursiones y visitas, que fueron seguramente muy emocionantes para los alumnos argentinos, así como también la experiencia del invierno con nieve, que no conocen en su región. Fuimos juntos a la escuela durante cuatro semanas. Fue interesante observar a los rafaelinos y lo curioso que son por aprender algo nuevo y como siempre tomaban nota de todo. Mostrarles la gran variedad que ofrece Alemania fue realmente increíble. Recomendaría a todos los que tengan la posibilidad de realizar este intercambio, que lo hagan ya que hay mucho para ver, vivir y superarse.” (traducción del alemán) Vivien    



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Sandra Gertsch  (alemana) 5º año/ 2011/Terminalidad Economía. Se alojó en la casa de Emanuel Piovano.

Ella cuenta sobre su experiencia en Rafaela: “El intercambio estudiantil en Argentina me gustó mucho, mucho, muchísimo. Al principio tuve un poco de miedo de no poder entender el idioma, y durante los primeros días la comunicación fue un poco problemática. Pero después de unos días ya me había acostumbrado y mi familia, que eran muy amables, me hicieron sentir como si estuviese en mi casa. También los amigos de nuestros compañeros de intercambio nos recibieron como amigas y fueron muy simpáticos. Hicimos muchas actividades, tanto excursiones con las familias, como también ir a cumpleaños, a los cuales fuimos invitadas. Fue en general una gran experiencia. Disfruté mucho los días allí y al final el mes había pasado demasiado rápido. Lo que nos queda son increíbles recuerdos y muchas fotos. Por supuesto, si pudiese, sin duda volvería a viajar a Argentina.”(traducción del alemán) Sandra


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Juan Ignacio Russo (argentino) 5ºaño/2011/Terminalidad Electromecánica. Se alojó en la casa de Vivien Balzat.
Juan nos cuenta su experiencia en Elmshorn: “Yo tengo solamente palabras de agradecimiento por todo. Este mes ha sido el mejor de mi vida y nunca olvidaré este viaje. Todas las personas fueron muy simpáticas y amigables conmigo!!! Alemania es un país maravilloso, con hermosos paisajes y lo mejor, gente muy buena y simpática. En mi país la gente piensa que los alemanes son fríos, pero no es así. Cuando yo regrese les contaré que aquí la cultura es diferente y me gusta mucho. Espero que esta amistad que ha comenzado con el intercambio continúe en el tiempo. Muchas, muchas gracias a todos. Siempre los llevaré en mi corazón.” 


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Jonatan Heit (argentino) 5ºaño/2011/Terminalidad Electromecánica. Se alojó en la casa sustituta de Phillip.

Emanuel Piovano (argentino) 5ºaño/2011/Terminalidad Electrónica. Se alojó en la casa de Sandra Gertsch.
"Experiencias de los tres  alumnos en ALEMANIA" ¡¡¡HERMOSO!!!
Comida: Como era de suponer, hubo diferencias con la dieta que llevamos los argentinos…muchas verduras y poca, muy poca carne! Pero todo muy rico igual, y mucho más sano…Adaptarse a la dieta alemana no costó tanto, pero lo complicado fue amoldarse a los horarios. Hay 2 comidas “fuertes”: a las 16:00 y otra a las 19:30 hs, aunque no todos los días se respeta el mismo horario. El desayuno se parece bastante a lo que acostumbramos, aunque es mucho más abundante, y los estudiantes almuerzan en la escuela lo que se lleven de sus casas, o bien compran en la cantina.
Tránsito: la forma en que se conduce es muy distinta a la que acostumbramos. Todas las calles (excepto avenidas) son doble mano, y los autos se estacionan en ambos cordones, y cuando solo hay espacio para un auto, uno de los conductores espera detrás de los autos estacionados. Además las calles son de forma irregular. Los peatones tienen prioridad de paso (todos frenan!), pero en lugares muy transitados tiene prioridad el tráfico. Por eso los semáforos tienen un botón que da luz verde a los peatones. En invierno casi no se ven motos circulando por las calles, y las bicicletas tienen un carril exclusivo en la vereda, pero también van por la calle.
Familia anfitriona: En mi caso, todos siempre fueron muy simpáticos y cordiales, siempre atentos por si necesitaba algo y con ganas de hablar sobre nuestro país. Se preocupaban todo el tiempo por si estaba pasándola bien en Alemania y programaban actividades para que no me aburra. Nos llevaron a conocer lugares increíbles y nos incluyeron en sus actividades extraescolares, y lo más importante, nos hicieron sentir como un miembro más de su familia.
Juventud: A casi todos los amigos que nos hicimos allá los conocimos en la escuela. Y había chicos y chicas de muchos países: Rusia, Georgia, Albania, Holanda y seguramente de otros también. Todos son muy simpáticos (al contrario de la creencia popular de que los alemanes son fríos y un poco antisociales). Siempre se acercaban a charlar con nosotros y nos invitaban a hacer cosas con ellos.
Escuela: La escuela resulto muy diferente. Es un edificio enorme y moderno, al cual asisten 3500 alumnos. Lo diferente es la forma en que dictaban las clases, siempre eran debates sobre un tema de actualidad apuntando a la materia en la cual se estaba. Y además no se escribía mucho en las carpetas como se hace acá.
Los horarios en la escuela normalmente eran de 8:00 hs a 15:00hs. Allí se debía almorzar (hay servicio de cantina o podes llevarte el almuerzo desde tu casa.)
Personas: Se los cree a los europeos de personalidad fría. Pero inmediatamente al llegar a Alemania, nos dimos cuenta que esto no es así. En todo momento fueron muy simpáticos, amigables y agradables con nosotros. Desde el momento en el que llegamos nos comenzaron a hacer preguntas sobre nuestro país y como era nuestra vida aquí. Y siempre trataron de que pasemos de mejor manera nuestro intercambio. Nos llevamos un gran recuerdo de ellos.
Clima: El clima en invierno es muy frío (llegó a los -18ºC.) Además hay pocos días de sol, predomina los días nublados y con lloviznas. También disfrutamos de algunos días de nieve, pero no en mucha cantidad y esto se debe a que estábamos en una zona de llanura.
Las bajas temperaturas provocaron una capa gruesa de hielo en los ríos, y por esto se podía caminar sobre ellos o practicar algún deporte como jockey sobre hielo.
Emanuel, Juan y Jonatan